martes, 5 de julio de 2011

ya no estás en buenos aires

como le pasa a los hombres, que después de muchos años se reencuentran con una ex novia a la que dejaron porque no se sentían lo suficientemente maduros para afrontar una relación, me reencontré con buenos aires.


esperando al 132 en la calle hipólito yrigoyen y castro barros me sentí un poco más lejos de lo que vengo odiando de esta ciudad, más que de este barrio. el amontonamiento, el síntoma de hacer colas porque sí. hipólito yrigoyen está más cerca de berlín, ponele, que de almagro. al menos ahí donde está el colegio san francisco de sales.

esta calle me da ganas de esperar el colectivo, el paisaje es meláncolico, casi no pasan medios de transporte y además de linyeras y colegios hay varios de esos bares viejos mal renovados, que dan berretas. es absoluta decadencia visual. así eran barrios hace varios años en esta ciudad, no sólo algunas calles que te cruzás de vez en cuando.

es relajante ver que todavía se puede encontrar calles con edificios de alturas similares y considerables, que no tapan el sol y caminar por veredas anchas y vacías.

Si ves un anuncio de algún político acá no lo votes nunca!!!

Seguramente es un forro que no lo soporta ni su familia!!!!!